sábado, 7 de febrero de 2009

Los EREs sentimentales

Ayer fue un mal día de esos que acaban teniendo momentos graciosos y hasta alguno inolvidable, pero un mal día. Lo malo de los días como el de ayer, es que te hacen más vieja pero no siempre más sabia. Porque tú creías que lo habías visto todo y te das cuenta de que no y al hacerlo descubres que no eres ni tan sabia, ni tan madura, ni estás preparada para todo.

Lo bueno de tener amigos en el curro es que cuesta menos levantarse por las mañanas. Lo malo es que, cuando tú creías que tenías perfectamente diferenciado el trabajo de la amistad, van, despiden a algunos de ellos y te das cuenta que ese difícil equilibrio se ha roto en mil pedazos. Te das cuenta de que el lunes no van a estar allí. No es que no vayas a verlos porque estás liada en la planta de arriba y ellos curren en la de abajo, no es que no vayan a estar en el messenger para decirte “Negra dame café que palmo de sueño”, no es que cuando les digas “¿tienes un segundo?” no te vayan a contestar ese “y 2” que tanto te gusta, no... no es eso.

Todo eso, si era de verdad, lo vas a seguir teniendo. Es sólo que ahora sabes, que ese sitio donde vas a volver el lunes va a ser más frío y más triste, y también va a estar más vacío y va a ser más difícil trabajar porque se han ido muchos de los buenos. Y los que nos quedamos, vamos a estar más perdidos y no vamos a estar cómodos, porque desde nuestra situación de privilegiados estaremos a medio camino entre el alivio de la supervivencia económica y la culpabilidad del que está ahí sin saber muy bien por qué.

Si no confío en el criterio que ha decidido que ellos se van, tampoco lo hago en el que ha decidido que yo me quedo. Así que, aunque mi instinto de supervivencia me obligará a pasar el fin de semana intentando resetear, soy consciente de que el lunes llegaré allí triste, descreída, con poquita moral y con mi nombre dentro de un ERE que, en lugar de a mi cuenta corriente, han aplicado a mi pobre corazón.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Aupa!!

Api dijo...

vente arriba, negra, vente arriba.
que aún con ERE, te ha quedado el derecho a paro sentimental. la cosa es hacer pronto los papeles.

Api dijo...

vente arriba, negra, vente arriba.
que aún con ERE, te ha quedado el derecho a paro sentimental. la cosa es hacer pronto los papeles.

Federiko dijo...

Muy bonito, negra, muy bonito. Y comparto además emociones, puesto que en mi empresa nos han desmembrado también, se han cargado a uno de los integrantes de mi peñita y las 7 horas 53 minutos de cada jornada laboral serán más aburridas desde el lunes.