lunes, 1 de octubre de 2007

¡Sobreviviré!

Habréis notado que últimamente os tenemos un poco desatendidos. Api es que tiene una agenda muy... apretada, últimamente, y yo pues... hago lo que puedo por apretar la mía. El caso es que yo llevo unos días intentando escribir algo más consistente que mi última intervención (me dejé llevar por el momento), pero es que cada vez que me ponía aparecía sobre mi la sombra del Banderillero diciéndome aquello de ese “toque de realismo negativista tan tuyo”, y, antes de empezar, me venía abajo.

Estoy tristona. Hay días que me río por no llorar, y la mayoría directamente, lloro por no reír. El caso es que intentando quitármelo de encima, el viernes decidí que todo era culpa de septiembre, que se me había dado mal, pero, como ya acababa no problem. Que me tengan que operar, no problem. Que en el trabajo me vaya mal o mejor dicho, no me vaya, no problem. Que últimamente llegue a fin de mes fatalín, no problem. Con octubre todo iba a tener solución. Y además, desde aquí lo digo, gracias al-artista-antes-conocido-como-gurb, no todo el mes ha sido para olvidar.

Así que me planté en el viernes pensando que ya estaba hecho, máxime si tenemos en cuenta que el sábado y el domingo mi plan era no socializar nada más que con el chico del kiosko al bajar a por el periódico. Pero, quiso la fatalidad que en medio de mis sueños de la siesta del sábado tarde se escuchara un “pi-pí” lejano que me hizo entrar en una especie de pesadilla y me despertó. Cuando me di cuenta de que era mi teléfono me levanté y miré. Un mensaje recibido. Mi casero. Le dije que sí, y un rato después quedaba con él en el bar de siempre.

Mi casero es un buen tío, o al menos lo parece. Nos llevamos bien y, cuando quedamos, solemos estar un par de horas de charla como si fuéramos viejos amigos. Casas, coches, el trabajo, los temas no son muy variados pero la conversación es amena. El sábado no varió, la cita seguía el guión habitual, pero él tenía mala cara. Al final lo soltó: se acabó mi suerte. Tengo que dejar mi/su casa. Creo recordar que sólo pestañeé. Al cabo de un rato reuní fuerzas y solté un “qué pena” que – juraría – le dolió más a él que a mi.

La sensación fue más o menos la de un “coitus interrumptus”, paran cuando falta lo mejor. Mi historia de amor con mi casa (si hay alguien – que me extraña – a quien no se lo haya dicho aún se lo digo ahora: “me encanta mi casa y estoy encantada de vivir en ella”) tiene fecha fin. Sé que aún me pueden ir más cosas mal, y que nada de lo que me pasa es grave, pero... qué queréis que os diga. Este fin de semana he sido la viva imagen del desánimo.

Aún así... anoche (no sé exactamente la hora, pero probablemente sería ya octubre), de repente, tuve una de esas revelaciones que a veces me proporciona la televisión. La encendí por inercia, como siempre, para que hiciera ruido mientras cenaba, y por esa misma inercia le di al 1 en el mando. Estaban dando la segunda parte de Bridget Jones. Me quedé. Y cuando el desánimo iba a entrar conmigo en octubre – uno de mis meses favoritos – esa periodista gordita y patosa, que escribe diarios y siempre habla y come de más, dijo:
“La felicidad es posible. Aunque tengas 33 años y el culo como dos balones de fútbol”
Y en ese momento me reí con ganas por primera vez en todo el fin de semana y pensé: “Sobreviviré”.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Negra, la Paca y yo estamos contigo. Obvio que sobrevivirás y poquito a poco los problemas de Septiembre se irán diluyendo. Encontrarás otro piso en el que estarás tan bien como en este y nos reiremos de todo esto tomándonos unas cañas. Un día de cocimiento en breve no te viene mal.

Un besito.

Api dijo...

Yo es que no veo claro todavía que tengas que abandonar la casa. Igual el público te salva a última hora.

Y, mujer,no te agobies, que como decian en Nuevo Vale -qué gran revista, cuánto ha aprendido con ella nuestra generación- hay días guays y días pedo.

Bueno, y días de mierda, como éste, pero esto lo añado yo.

LaNegra dijo...

Venga, vale...
Lo habéis conseguido...
Y aunque sean las putas 22.06 h. de la noche y yo esté en la oficina con lágrimas en los ojos, me habéis hecho reir.
Ya sé que os lo digo muchas veces, pero... sois grandes, los dos.

+++bsts.

Anónimo dijo...

Muy acertada la foto de la tal "Bridget", este blog cada día me recuerda más a su "diario".

LaNegra dijo...

Diré en nuestra defensa que aún no hemos empezado a contar las calorías de lo que nos comemos....

Anónimo dijo...

Creo que éste es un buen momento para inaugurar mi incursión en vuestro blog.
La idea de las cañas y de una alegría pa'l cuerpo me parece fantástica para levantarte el ánimo. Y si además quieres pasar unos días de asueto en el norte, sabes que tienes casa. Las cañas te las garantizo (estoy dispuesta a emborracharme a cervezas, agghhh) pero lo de la alegría pa'l cuerpo... de eso andamos mal por estos lares.
Mucho ánimo desde Pasaia.

Api dijo...

Pasaiatarra, qué alegría saber de ti!!!!

Invitada al norte, aunque menos, ya está pero no se deja querer la tía... perra

Espero que todo vaya bien por ahi

besos
api

Api dijo...

que digo menos norte, no me nos invitada, eh?

LaNegra dijo...

Jejejejeje
Qué sorpresa!!!!
Esta mañana Api y yo estábamos intrigadas con el "anónimo" recibido, y mira tú quién era ;-)

Sigue viniendo a vernos, que nos hace mucha ilusión :-)

Yo iré a veros a ambas al norte, ya sabéis que mi brújula siempre apunta para allá.

+++bsts.

Api dijo...

No siempre, no siempre.

Anónimo dijo...

Aparte del bebercio dale a la comida sana: queso idiazabal
A ver esa de la cofradia que no empuja su consumo.

Firmado Comando Oveja Latxa