domingo, 4 de noviembre de 2007

Lugares comunes

El otro día me contaron que mi ex se va de vacaciones y, de paso, me dijeron el destino. ¡Oh casualidad!, se va al mismo sitio que fue conmigo. El dato me hizo recordar una de esas teorías sobre los hombres que llevo años manteniendo y que las amigas me compran alguna vez (siempre en función de cómo les vaya con su último ligue), y no es otra que los tíos tienen la manía no sólo de cocinarnos a todas su plato estrella, sino también de llevarnos a todas a los mismos sitios: lugares de vacaciones, restaurantes, bares, rincones de los parques...

La historia es que esto de los lugares comunes - que podría verse como un valor seguro al que se agarran para triunfar, igual que lo hicieron contigo, y con las anteriores a ti – puede, si no se tiene mucho tacto y un poquito de suerte, volverse contra ellos.

Aún recuerdo – Api perdóname que te pise la anécdota, pero es muy ilustrativa – aquella noche en la que Api, el que entonces era su nuevo novio (que yo le había presentado) y yo, fuimos a darnos un festín a un restaurante italiano que estaba al lado de casa y del que éramos asiduas. Un sitio con platos muy ricos, apañado de precio y una decoración bastante “romántica”. El caso es que estábamos cenando y yo oí cómo alguien a mi espalda pedía la carta de vinos y pensé que “qué pijerío, lo que hace el personal para impresionar”. Ya os digo que el local era agradable pero no de lujo. El caso es que Api de vez en cuando miraba por encima de mi hombro y yo pensaba que era porque, como yo, se había quedado con el “detalle”, pero, justo antes de irnos Api dijo que iba al baño, a la vuelta, se sentó (estaba enfrente de mi) y me miró con ojos desorbitados mientras me decía: “el de la mesa de detrás es Mr.Calidad”. Ipso facto nos levantamos, nos acercamos a la mesa y – tras interrumpir el love in the air que flotaba – saludamos muy educadamente a la parejita. Api flipaba, su nuevo novio no entendía nada y a mi me dio por reírme, pero la cara de la Paramecios que acompañaba a Mr.Calidad – anterior novio de Api - no tuvo precio.

Ese día lo que falló fue la suerte. Otras veces, sobre todo si el tío que te acompaña es el rey de la sinceridad, acaba fallando el tacto. Porque a menos que el muchacho sea muy muy discreto, al final, le acaba traicionando el ¿sub?consciente y se le escapa un: “pues mi ex decía que este arco es el lugar con más encanto de la ciudad”. Ahí es donde tú pones cara de póquer y, si todavía no hay mucha confianza, sólo sonríes, pero como ya os conozcáis un poco más le acabas soltando el consabido: “a mi tu vida anterior no me interesa, sólo me importa el presente”. Y claro, esta frase, según el tono en que se diga, puede tomarse muy bien o, directamente, fatal.

Supongo que cuando ya llevas unos cuantos novios, tú acabas haciendo lo mismo – hay veces que la imaginación nos falla y echamos mano de los recursos – y acabas siendo más “indulgente” con estas cositas. Lo que pasa es que yo novio, lo que se dice novio, sólo he tenido uno, y todavía no he alcanzado ese nirvana. Por eso, cuando pienso que quizá esta noche, o la de mañana, o cualquiera de las noches de esta semana él se va a apuntar un magnífico tanto gracias a cierto restaurante con vistas al mar que acabó siendo lo más mágico de aquel viaje y que descubrimos sólo porque YO sabía dónde estaba gracias a una amiga,... se me llevan los demonios... concretamente el demonio del Timanfaya...

Así que... qué queréis que os diga, me da igual que tenga nueva novia (la primera me afectó más, la segunda me lo esperaba, y a partir de ahí, dejé de contar), me da igual que la lleve al mismo sitio que a mi, pero me jode viva que la vaya a llevar a ese restaurante y sé que lo va a hacer.

Pero me queda una esperanza: los tíos sinceros me vuelven loca.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo he de confesar que a más de una (o sea a dos) les he regalado el mismo CD. Pero escuchando este CD a mi memoria vienen recuerdos (muy bonitos) que no tiene nada que ver con estas chicas. La verdad ahora me parece un poco ridiculo. Pero toda vale para conquistar a una mujer ó salvar a un hombre, o viceversa.
Y los sitios mágicos (y nunca entraran en esta liga los restaurantes, ni cualquier sitio más o menos turístico) me gusta compartirlos. Con cuanta más gente mejor.
NOTA1: estas no son horas y tampoco he tenido puente. El viernes vuelo a Murcia.
Nota2: El Cd se llama algo así. Living Theater. Josep Baldasare. (hay que oirlo entero)

Desde muy muy lejos

Api dijo...

a mi es que esas islas... las tengo gato. En Lanzarote estuve con Mr. Calidad y hacía un frío del carajo y tormenta del desierto. Luego fui con el siguiente a Gran Canaria, creo recordar, y bueno, si, pero sin más.
Y lo de repetir sitios o regalos ... pues yo también creo qeu si un sitio te gusta es normal que se lo quieras enseñar al "siguiente titular". Los sitios son los mismos, las experiencias no.

Anónimo dijo...

no te engañes, todos lo hemos hecho alguna vez; es como re-contar un chiste que te contaron y te hizo mucha gracia.

Federiko dijo...

El post ha entrado en Antología "La Negra", que lo sepas.
Espero tener otro rato para comentar.