martes, 4 de agosto de 2009

La bruja del cuento

Llego ahora de la piscina de la Complutense con dos reflexiones. Por un lado, después de trece años con él en el armario por fin el título de licenciada universitaria me ha servido para algo. Sin él no se puede entrar en estas piscinas, a no ser que vayas de acompañante. Y dos, no permite la entrada a menores de 18 años. Lo que en la práctica quiere decir que no pueden entrar niños. Algo que supongo que le parecerá fatal a las familias, pero qué se le va a hacer. Tampoco he visto a nadie quejarse de eso en la puerta, y además, para qué negarlo, es una de sus ventajas.
Esto viene al caso porque el otro día chismorreando por algunos blogs, encontré uno de una chica que vive en el centro de Madrid y que además de quejarse de las pocas guarderías que hay en la zona, ponía a parir e incluso invitaba a que nadie fuera al Hotel Me de la plaza de Santa Ana de Madrid. Contaba la bloguera que había intentado subir con su marido y su niño de dos años a la terraza del Me y que les habían intentado cobrar 12 euros por cabeza. Al parecer no les importó asumir semejante atraco pero accedieron. En ese momento, el portero les explicó que no se permitía la entrada a los niños. Los comentarios del blog animaban a denunciarlo a la Policía. No haré yo aquí un alegato a favor de ese hotel -que te cobra por hacer fotos en su interior, aunque es publicidad para ellos- oo que tampoco dejó subir en su momento a La Negra. Yo de lo que me quejo es que tal vez tenga que haber también sitios restringidos a los lloros y a los gritos de los niños. Criaturas que adoro, dicho sea de paso. Pero creo que todo en su lugar y a su momento.

2 comentarios:

LaNegra dijo...

di que sí Api, boicot al Me que no me dejó entrar a mi con mis playeras cara pero sí a una foca (era aún más gorda que yo) sobre unos imposibles tacones de plástico...

pd. Api te veo desatada!! viva el verano y el ADSL ;)

Api dijo...

márcate tú algo irlandés guapa, que nos tienes desatendidos.

viva la salsa pomodoro!